La operación de varices es una intervención médica común para tratar las venas dilatadas y tortuosas que pueden generar molestias, dolor e incluso complicaciones circulatorias. Pero una de las preguntas más frecuentes es: ¿es dolorosa la operación de varices? En este artículo, te explicamos en detalle cómo se realiza, qué tipos existen, el nivel de dolor, la recuperación, riesgos, y consejos para aliviar molestias, con el objetivo de que tomes una decisión informada.
¿Qué son las varices?
Las varices son venas inflamadas, alargadas y con una función alterada, generalmente visibles bajo la piel, sobre todo en las piernas. Surgen por un fallo en las válvulas que regulan el flujo sanguíneo, haciendo que la sangre se acumule y dilate la vena.
Más información: MedlinePlus sobre varices
Tipos de cirugía para las varices
Existen diferentes procedimientos quirúrgicos para tratar las varices, y la intensidad del dolor puede variar según el método:
1. Escleroterapia
- Dolor: Mínimo, solo una ligera molestia al aplicar la inyección.
- Recuperación: Inmediata, se puede retomar la rutina el mismo día.
- Ideal para: Varices pequeñas o arañas vasculares.
2. Ablación por láser o radiofrecuencia
- Dolor: Moderado. Se realiza con anestesia local. Puede sentirse una leve sensación de ardor postoperatorio.
- Recuperación: De 2 a 7 días.
- Ver técnica de ablación en Mayo Clinic
3. Flebectomía ambulatoria
- Dolor: Leve. Se usa anestesia local y el dolor postoperatorio suele ser controlado con analgésicos suaves.
- Recuperación: 1 semana.
4. Stripping venoso (cirugía tradicional)
- Dolor: Moderado a alto en algunos casos. Se realiza con anestesia general o raquídea.
- Recuperación: 2 a 4 semanas.
¿Duele la operación de varices?
La mayoría de las intervenciones para tratar varices no son dolorosas gracias al uso de anestesia local o general. En general, el dolor postoperatorio es leve y se puede controlar fácilmente con analgésicos comunes como ibuprofeno o paracetamol.
Síntomas comunes tras la cirugía:
- Sensación de pesadez o tirantez en la pierna
- Hematomas (moretones)
- Inflamación leve
Estas molestias suelen desaparecer en pocos días.
¿Cómo es la recuperación?
La recuperación depende del tipo de cirugía:
- Usar medias de compresión durante 1 a 4 semanas
- Evitar estar de pie por largos periodos
- No hacer ejercicio intenso durante la primera semana
- Caminar a diario ayuda a mejorar la circulación
Riesgos y complicaciones posibles
Aunque es una cirugía segura, pueden existir efectos secundarios:
- Infección en la zona tratada
- Trombosis venosa superficial
- Daño nervioso (muy raro)
- Reaparición de las varices con el tiempo
Es fundamental elegir un cirujano vascular certificado y seguir las recomendaciones médicas para reducir riesgos.
Consejos para aliviar el dolor postoperatorio
- Eleva las piernas al descansar
- Usa medias de compresión adecuadas
- Aplica compresas frías en caso de inflamación
- No uses tacones ni ropa ajustada
- Mantén una dieta antiinflamatoria rica en frutas, verduras y omega-3.
Más sobre alimentación para la circulación en Fundación Española del Corazón
Conclusión: ¿Vale la pena operarse?
Sí, si las varices están afectando tu calidad de vida o representan un riesgo para tu salud, la cirugía es una opción efectiva y generalmente poco dolorosa. Gracias a los avances médicos, muchos procedimientos son mínimamente invasivos y de recuperación rápida.
Consulta siempre con un angiólogo o cirujano vascular para evaluar tu caso. No ignores síntomas como dolor constante, hinchazón o cambios de color en la piel.
¿Sufres de varices y te preocupa el dolor de la operación? Consulta con un especialista y descubre la mejor opción para ti. Comparte este artículo si te fue útil y ayuda a otros a informarse mejor.