Los científicos de la Universidad de Yale pueden haber hecho un gran avance en la búsqueda del tratamiento de la enfermedad de Alzheimer. Un antiguo antibiótico, conocido como «Suprax» o «cefixima» pasado en forma líquida y probada en ratones habría dado resultados sorprendentes hasta que, al menos, restauró parcialmente la memoria.
un importante descubrimiento da esperanza a los enfermos de Alzheimer.
Según el profesor André Nieoullon, este es un estudio, principalmente en el campo de la biología celular, que trae nuevos datos que, en la etapa actual de este trabajo, es particularmente importante para confirmar una serie de hipótesis sobre los mecanismos involucrados. Enfermedad neuro-patológica, con una perspectiva lejana de una terapéutica y por lo tanto una esperanza para los enfermos y sus familias.
Pero los autores de la investigacion estan muy reservados en sus conclusiones y esencialmente se adhieren al hecho de que los compuestos que han identificado, y que corresponden a esta clase de antibiótico conocido como tal, es probable que interfieran Con el mecanismo que conduce a la destrucción de las neuronas.
Para comprender, se debe recordar que se sabe que los procesos neurodegenerativos en la enfermedad de Alzheimer y las demencias relacionadas involucran proteínas específicas, que tienen la capacidad de agregarse en ciertas regiones del cerebro, lo cual es bien conocido como las famosas «placas seniles», que acompañan el proceso de degeneración de las neuronas cercanas, de ahí los trastornos cognitivos y, especialmente, los déficits de memoria asociados.
Lo que los investigadores han descubierto es que el proceso de la enfermedad se desencadena por la interacción de dos proteínas que han identificado. El desafío es encontrar una manera de evitar que estas proteínas interactúen.
Luego, los investigadores utilizaron un modelo animal considerado como un análogo experimental de la enfermedad de Alzheimer, al menos por algunos de sus aspectos neuro-patológicos y de comportamiento, en particular una forma de déficit de memoria.
Luego demostraron que la administración de un producto, el antibiótico conocido como Suprax o Cefexime en forma líquida, en los ventrículos cerebrales que usan mini-bombas en realidad tenía la capacidad de reducir los déficits de comportamiento en una tarea bien conocida de la memoria espacial, y además los señales neuronales de la enfermedad podrían reducirse.
Finalmente, muestran que estos efectos de comportamiento se obtienen solo por administración intra-cerebral y no por administración simple por inyección periférica del producto.